Aníbal (247-183 a. C.) fue el más grande de los generales de Cartago, que puso en serios aprietos a Roma durante la II Guerra Púnica, conflicto que enfrentó a las dos superpotencias, Roma y Cartago, por el predominio en el Mediterráneo occidental. Cruzó los Pirineos y los Alpes con un ejército a lomos de elefantes y llegó a sitiar Roma. Fue derrotado por el general romano Escipión en la batalla de Zama.