Atahualpa fue el último soberano inca. Nació en Quito, alrededor del año 1500. Hijo de Huayna Cápac y Tocto Coca, que descendía del linaje de Pachacútec. Desde muy joven se destacó como un valiente guerrero y más adelante demostró ser un hábil conquistador. En su calidad de Inca Hanan, Atahualpa vivió siempre fuera de Cusco, a diferencia de su medio Hermano Huáscar, quien siendo Hurin, estaba siempre en la capital del imperio.