Egipto y el valle del Nilo - aula[media]



Al noreste de África, en un territorio rodeado por mares y desiertos, se desarrolló Egipto, una de las más grandes civilizaciones de la Antigüedad.

El territorio egipcio se caracteriza por su extrema sequedad; sin embargo, el río Nilo lo atraviesa de sur a norte y le provee de agua. Este río, de 6853 kilómetros, nace en África central y desemboca en el mar Mediterráneo formando un amplio delta. En su recorrido da origen a un fértil valle debido a que sus aguas transportan un sedimento rico en nutrientes llamado limo, que sirve como fertilizante natural.

Los antiguos egipcios veían al Nilo como fuente de vida, por lo que le entregaban ofrendas y lo consideraban un dios.

En el territorio Egipto de distinguían dos zonas:

El Bajo Egipto, cuya capital era Menfis, estaba conformado por el delta, una zona pantanosa de abundante pesca donde crecía el papiro, planta que se usa para elaborar papel.

El Alto Egipto, que tenía como capital a Tebas, estaba constituido por un valle longitudinal rodeado por el desierto. Las principales ciudades se asentaron al este del río.