La vestimenta de los incas era muy sencilla: las mujeres usaban un vestido largo, atado a la cintura por una faja, un manto que se echaba sobre los hombros y sandalias u ojotas.

A partir de los documentos etnohist贸ricos se identifica que el calificativo de “orejones” fue otorgado a los nobles del incario por los espa帽oles a causa de la impresi贸n que les causaron las enormes orejas, ampliadas por los grandes pendientes que usaban. Para los Incas el horadarse los l贸bulos de las orejas y portar aretes decorativos era un s铆mbolo de poder social, una forma de connotar su pertenencia a la nobleza y la investidura como orej贸n se desarrollaba dentro de una ceremonia de gran trascendencia cultural (Guaman Poma ).
Garcilaso de la Vega, se refiere a la usanza de los Incas de utilizar las orejas horadadas, resaltando el crecimiento que se llegaba a obtener de ellas por medio de los objetos que se introduc铆an en los l贸bulos.
En los escritos de cronistas del primer per铆odo de contacto, se puede inferir que una de las principales fiestas realizadas por los Incas era la denominada Hatun Raymi, Capac Raymi o Guarachico, celebraci贸n en que se proclamaba a los nuevos orejones.